ALBUM DIA 17
Empezamos el día con un buen madrugón. A las cinco de la mañana dos rickshow nos están esperando a la puerta de las habitaciones del campus para trasladarnos a la estación del tren. Sobre las 6:30 y con un cuarto de hora de retraso cojemos el tren hacia Bangalore. El viajar en tren en la India es algo que no se puede dejar de hacer, si quieres conocer la verdadera India. Nosotros vijamos en sleeper, una zona con literas, que a medida que la gente se va levantando, se transforma en zona de asientos. Que nadie interprete que son como los trenes españoles, ni siquiera de hace 30 años. Aqui los vagones van petados de gente. Lo primero es pedir a quienes ocupan nuestras literas que las dejen libres, ver que todo el vagón tiene más m... que el palo de un gallinero, y que ir al baño es un acto de fé.
Las ventanas tienen verjas para que la gente no se cuele, y el aire acondicionado son ventiladores colgados del techo que cuando echen a andar miedo me dan. El viaje al final no se hace muy largo, ver a los viajeros, y el continuo ir y venir de un montón de vendedores de todo tipo entretiene. Venden comida, bebida, libros, pasatiempos, también hay pedigüeños, lisiados, mujeres con niños, todo lo que uno se encuentra en la calle, va desfilando a lo largo de los vagones, sin parar un minuto.
Llegamos a Bangalore, con adelanto, y en la propia estación cogemos unos taxis para desplazarnos al hotel Silver Square. Esta en el centro de la ciudad. Una ciudad moderna, nada que ver con lo anteriormente visto. Hay mucho movimiento de gente y coches, pero sin tanto caos como en Mumbay, y hasta parece que hay un cierto respeto a las normas. La calle es un bullicio y en los alrededores del hotel, hay tiendas modernas de ropa, calzado, McDonal´s, pizzeria, centros comerciales, pequeñas tiendas, lo mismo que en cualquier ciudad moderna.
Nos damos una vuelta por los alrededores y descansamos un poco en el hotel despues de comer en pizza al Pizza Hut, a mi me pasará factura, aún no estoy bien de la tripa y esta comida me impedirá cenar de noche.
Ya en la cena, nos encontramos en el restaurante The Only Place, con Barbara y Antton, con quienes estuvimos en la fundación. Todos se ponen tibios con chuletones de carne, patatas y huevos fritos, ademas de unos postres que se comian con los ojos. Yo, por desgracia y como medida de precaución no ceno nada, para no tener problemas al dia siguiente que nos espera un viaje de regreso muy largo.
Llegamos al hotel sobre las once menos cuarto, y nos encontramos que en el segundo piso, hay una discoteca con la música que hace temblar las columnas. Al dia siguiente nos tenemos que levantar a las tres de la mañana, la cosa se presenta chunga.
Preguntamos a los del hotel por lo de la música y nos dicen que sobre las once se acaba. No es a las once, pero por suerte poco después se acaba.
Empezamos el día con un buen madrugón. A las cinco de la mañana dos rickshow nos están esperando a la puerta de las habitaciones del campus para trasladarnos a la estación del tren. Sobre las 6:30 y con un cuarto de hora de retraso cojemos el tren hacia Bangalore. El viajar en tren en la India es algo que no se puede dejar de hacer, si quieres conocer la verdadera India. Nosotros vijamos en sleeper, una zona con literas, que a medida que la gente se va levantando, se transforma en zona de asientos. Que nadie interprete que son como los trenes españoles, ni siquiera de hace 30 años. Aqui los vagones van petados de gente. Lo primero es pedir a quienes ocupan nuestras literas que las dejen libres, ver que todo el vagón tiene más m... que el palo de un gallinero, y que ir al baño es un acto de fé.
Las ventanas tienen verjas para que la gente no se cuele, y el aire acondicionado son ventiladores colgados del techo que cuando echen a andar miedo me dan. El viaje al final no se hace muy largo, ver a los viajeros, y el continuo ir y venir de un montón de vendedores de todo tipo entretiene. Venden comida, bebida, libros, pasatiempos, también hay pedigüeños, lisiados, mujeres con niños, todo lo que uno se encuentra en la calle, va desfilando a lo largo de los vagones, sin parar un minuto.
Llegamos a Bangalore, con adelanto, y en la propia estación cogemos unos taxis para desplazarnos al hotel Silver Square. Esta en el centro de la ciudad. Una ciudad moderna, nada que ver con lo anteriormente visto. Hay mucho movimiento de gente y coches, pero sin tanto caos como en Mumbay, y hasta parece que hay un cierto respeto a las normas. La calle es un bullicio y en los alrededores del hotel, hay tiendas modernas de ropa, calzado, McDonal´s, pizzeria, centros comerciales, pequeñas tiendas, lo mismo que en cualquier ciudad moderna.
Nos damos una vuelta por los alrededores y descansamos un poco en el hotel despues de comer en pizza al Pizza Hut, a mi me pasará factura, aún no estoy bien de la tripa y esta comida me impedirá cenar de noche.
Ya en la cena, nos encontramos en el restaurante The Only Place, con Barbara y Antton, con quienes estuvimos en la fundación. Todos se ponen tibios con chuletones de carne, patatas y huevos fritos, ademas de unos postres que se comian con los ojos. Yo, por desgracia y como medida de precaución no ceno nada, para no tener problemas al dia siguiente que nos espera un viaje de regreso muy largo.
Llegamos al hotel sobre las once menos cuarto, y nos encontramos que en el segundo piso, hay una discoteca con la música que hace temblar las columnas. Al dia siguiente nos tenemos que levantar a las tres de la mañana, la cosa se presenta chunga.
Preguntamos a los del hotel por lo de la música y nos dicen que sobre las once se acaba. No es a las once, pero por suerte poco después se acaba.
